¿QUÉ ES?


¿QUÉ ES LA BIODINÁMICA CRANEOSACRAL?

La Biodinámica Craneosacral es un trabajo sutil y no intrusivo, en el cual no hay necesidad de desvestirse y no se utiliza aceite.

El propósito de una sesión de Biodinámica Craneosacral es el de apoyar y cooperar con la Salud inherente de nuestro cuerpo.














Nuestro cuerpo como todo ser vivo, tiene su propia capacidad de autocuración y autorregulación. Nuestra Salud reside en la memoria de cada una de nuestras células. Esta Salud se expresa en nuestro cuerpo a través de unos movimientos sutiles denominados “mareas”. Estas mareas se perciben a través de los tejidos, fluidos y potencias del cuerpo, también conocidas como la Respiración Primaria. Esta respiración es a nivel celular y es primaria porque es anterior a la pulmonar, la pulmonar sería secundaría ya que sucede una vez hemos nacido y empezamos a respirar a través de nuestros pulmones inhalando y exhalando oxígeno. La Respiración Primaria sucede de forma unitaria y harmónicamente al unísono en todo nuestro cuerpo.
El operador o terapeuta, opta la postura de cooperar con esta Respiración Primaria y permitir que sea ella la que realice las correcciones necesarias para el sistema, permitiendo de este modo que el sistema nervioso y todos los sistemas con él relacionados (endocrino, circulatorio, respiratorio, digestivo, etc.) se autorregulen. Esto se consigue mediante un contacto sutil con las manos, en posiciones específicas y educadas en diferentes partes del cuerpo, cabeza, sacro, pies, columna y diafragma junto con un espacio de conciencia meditativa y sensibilidad. Todo ello, te invita a un espacio de relajación profunda, en el cual tu sistema corporal se orienta hacia su memoria de autocuración.

La Biodinámica Craneosacral tiene además como resultado, hacer más consciente al individuo de sus propios recursos a todos los niveles, que le ayudan a superar momentos traumáticos, de estrés y de enfermedad en su vida cuotidiana.


“Trato de restaurar la salud. No estoy tratando de corregir el problema. De este modo, abro las puertas para que el cuerpo haga lo que necesita hacer con su propia fuerza vital”.
--> Dr. Rolling E. Becker